Trasladar la escuela a la naturaleza. Es lo que significa Bio-Escuela y eso justamente hicieron los alumn@s de 1º a 3º de todo el CRA Alifara el pasado 7 de junio en la Bio-escuela de Fuentespalda.
Ellos y algunos de sus maestros y maestras tuvimos la suerte de poder visitar una explotación agrícola alternativa completamente autosuficiente donde Inés, la propietaria, nos acompañó para contarnos cómo es posible fabricar sus propios alimentos y abonos necesarios para poder vivir.
Un gran domo geodésico nos recibió al principio de este viaje por la autosuficiencia natural. Después de un buen almuerzo, nos repartimos por talleres y por cursos (1º, 2º y 3º), para que los niños y niñas tuvieran la oportunidad de relacionarse con los de otras localidades de su misma edad.
Los niñ@s de tercero empezaron la visita en el huerto con Inés, que nos explicó la importancia de la luna en la vida de las plantas. Sus épocas de plantación y fruto están basadas en un sistema de cultivo rotativo en función del calendario lunar. Se trata de una técnica con base científica utilizada hace millones de años. Desde luego...¡un gran descubrimiento!
Después pasamos al jardín de las plantas medicinales y las hierbas aromáticas, donde agudizamos el olfato. Pudimos aprender que hay plantas para cada enfermedad: respiratorias, intestinales... En la siguiente parada se les enseña a los escolares la importancia que tiene la depuración de aguas en toda civilización principiante. La familia Mayjal ha creado un sistema artesanal de reciclaje de aguas negras que, según explican, "es totalmente eficiente" y que les permite reutilizar el agua y generar fertilizante para la base de la finca. Y por último, la Acuaponia, un invernadero donde los peces de un bonito estanque dan de comer a las plantas a través del abono.
Y de las plantas, al reino animal que estamos viendo en este trimestre en el cole. Pudimos ver conejos, gallinas, pavos, cabras, gallos, ¡hasta una preciosa oca se paseó delante de nosotros! Poco antes de visitar el interior de un caracol gigante que alberga varias razas de estos pequeños moluscos y tortugas.
El segundo taller consistió en construir nuestro propio domo en miniatura. Hemos aprendido que se trata es la construcción más fuerte que existe, y que está construida con pentágonos. Al final del viaje, sorteamos los tres que habían construido los chavales y cada localidad pudo llevarse una, gracias al amable gesto de Lara, la monitora que nos acompañó en este segundo taller.
El tercer grupo, mientras, disfrutaba de lo lindo en el parque de tirolinas, colchonetas y columpios que había diseminados en medio del campo. Se lo pasaron en grande y lo más importante, se relacionaron de forma amistosa, compartieron una mañana juntos y se portaron muy bien. De hecho, Inés y Lara nos felicitaron por el buen comportamiento de los niños. Y nosotras a ellas por tratarnos tan bien y acompañarnos en todo momento.
Ya de vuelta, hicimos parada en el colegio Fuentespalda para comer, ya que amablemente nos habían cedido las instalaciones. En definitiva, fue un día muy enriquecedor y divertido, en el que además de aprender, los niños y niñas del CRA tomaron aire para la recta final de curso. Sin duda, una experiencia para repetir.